Objetivo del curso: aprovechamos la capacidad innata de los bebés para descifrar un idioma para que se familiaricen y exploren el mundo que les rodea también en inglés. Los juegos, las canciones, las sorpresas y la estimulación sensorial son los auténticos protagonistas de este curso. Mousy es el personaje que los acompañará a lo largo del curso. De la mano de este simpático ratoncito, descubriremos el inglés experimentando con los sentidos, cantando y contando historias breves.
Duración de la clase: 45 minutos, una vez por semana.
Grupos reducidos: cada clase cuenta con un máximo de 5 bebés, acompañados por una persona adulta cada uno.
El papel de la familia: cuando la familia se implica activamente en las actividades que hacemos en clase, se establece una conexión emocional entre los bebés y el idioma. Este vínculo estimula el aprendizaje.